Pasaron apenas días del momento en que la Selección Argentina Sub 21 alcanzó la gloria en el Campeonato Sudamericano Juvenil disputado en San Carlos de Bariloche. Catorce nombres estuvieron en aquel plantel, seis de los cuales son también representantes de Ciudad, club que a esta altura se ha acostumbrado al orgullo de tener jugadores en todos los niveles del combinado albiceleste. En esta oportunidad, Ignacio Roberts, Damián Zalcman, Sergio Soria, Agustín Loser, Jan Martínez y Felipe Benavídez fueron los embajadores de "Muni" -sumados al preparador físico Matías Koichi Rebelles- y en esta entrevista cuentan sus sensaciones, de qué manera se retroalimenta el trabajo de Ciudad y la Selección, y cómo encaran una nueva temporada con los colores del club.

El proyecto de Ciudad de formar jugadores y potenciarlos para alcanzar su máximo nivel viene dando sus frutos hace varios años, no sólo a nivel de inferiores con equipos multicampeones, sino también en su proyección hacia la Selección Argentina. Sin ir más lejos, este año tuvo a Luciano Palonsky dentro del equipo campeón sudamericano de la categoría menor -destacado en el equipo ideal del torneo- y a Gaspar Bitar y Jan Martínez como parte del plantel campeón de la Copa Panamericana Sub 23 (de la que también participaron Brian Melgarejo y Gastón Fernández, con pasado reciente en el club).

Los éxitos en las bases continuaron y se completaron con el primer puesto en el Sudamericano Juvenil. Bien en el centro de la escena estuvieron Martínez, Benavídez, Loser, Zalcman, Soria y Roberts, base del equipo titular del grupo comandado por Alejandro Grossi, campeón invicto en Bariloche. "Le ganamos a una potencia mundial como Brasil que cada día mejora muchísimo, pero nosotros también hemos mejorado y nos preparamos al máximo para disputar ese partido y traer la medalla dorada. Creo que Ciudad nos aporta el hecho de poder estar juntos y entrenar todo el año, eso nos potencia como equipo", abrió el juego el central Soria y lo complementó su compañero en el puesto, Loser: "Tener en la Selección a los compañeros del club es una ventaja porque te entendés mejor, estamos todos los días juntos y eso se refleja después en la cancha".

No es casual que prácticamente la mitad de un plantel provenga de un mismo equipo, algo que los jóvenes jugadores reconocen. El primero en reflexionar al respecto es Roberts, capitán y armador de la Juvenil: "En lo personal, Ciudad me permitió un gran crecimiento en mi juego, tanto en lo técnico como en lo táctico. Sin dudas, el club agrandó la posibilidad de quedar en la Selección" dijo. En la misma sintonía, el líbero Damián Zalcman agregó: "Creo que ser parte de Ciudad implica un altísimo nivel de compromiso y dedicación, porque los entrenadores te exigen al máximo. Muchos jugadores de Muni tuvimos la posibilidad de formar parte de seleccionados nacionales porque acá nos dieron las herramientas para desarrollarnos".

Más allá del campeonato, la actuación destacada de los chicos de Ciudad tuvo un correlato en las premiaciones individuales, donde los cuatro premios de la delegación argentina fueron justamente de jugadores del club: Benavídez como mejor punta, Loser como mejor central, Roberts como mejor armador y Martínez como mejor jugador del torneo. Al respecto, Felipe expresó: "A nosotros nos ayuda mucho el proyecto de Liga de Ciudad, que nos hace jugar contra jugadores de más experiencia, lo que te obliga a dar un salto de calidad mayor al resto. Después, entrenamos a la par de nuestros compañeros y tuvimos la suerte de tener buenos resultados”. Martínez, MVP del torneo, aportó: "Aparte del trabajo del día a día y de cómo jugó cada uno el torneo, ayuda mucho jugar la Liga. Eso te da un plus sobre los demás por estar en contacto con jugadores más grandes, te ayuda a mejorar más rápidamente”.

Todos ellos coincidieron en la importancia de la competencia, y sobre todo del roce que les permite Ciudad, a la hora de alcanzar este tipo de logros. Con apenas 18 años ya tienen en sus espaldas la experiencia de haber disputado una Liga, un detalle que no dejaron pasar por alto. "Creo que lo que hace Ciudad al proyectar jugadores es muy importante, porque nos permite tener muchos partidos y juego tanto en inferiores como en mayores. Además, nos abre las puertas a disputar una Liga, algo que es muy difícil en otros clubes y que te hace entender mucho más el juego y crecer a nivel voleibolístico y mental", explicó Loser. Soria también compartió su experiencia: “Desde que llegué a Ciudad empecé a jugar a un nivel mayor y eso me ayudó a mejorar. Además, el club fue la base para que todos nosotros crezcamos como jugadores; los entrenadores, el cuerpo técnico, el roce y la competencia nos ayudan a seguir mejorando”.

Uno de los puntos más importantes para estos jugadores tiene que ver con el trabajo mancomunado de la Selección y el club para lograr empujar a cada uno al máximo de sus posibilidades en esta etapa de desarrollo. Es por eso que también las experiencias con la celeste y blanca se vuelven fundamentales a la hora de afrontar una nueva temporada con un equipo caracterizado justamente por su juventud. "La Selección me enseñó a dar el máximo siempre, a trabajar y dejar cosas de lado para conseguir lo que uno quiere. El Sudamericano me reafirma la idea de que para lograr los objetivos se necesita de un grupo unido, en el que todos tiren para el mismo lado, algo que encontramos en Ciudad y que hace que mis expectativas para la Liga sean altas", dijo Roberts. En la misma línea, Zalcman expresó: "Participar de la Liga significa un gran desafío. Entrenar junto a jugadores experimentados te ayuda a crecer dentro y fuera de la cancha. Por otro lado, los entrenadores te alientan a buscar la excelencia en todas las acciones y con esa consigna se trabaja".

Pensando en el próximo objetivo del equipo, el comienzo de la fase regular de la Liga, los puntas receptores tomaron la posta. Benavídez fue el primero en referirse al equipo: “En la Liga nos enfrentamos con jugadores más experimentados, pero tenemos la ventaja desde el aspecto físico y más amplitud para crecer. Ellos ya tienen un estilo de juego formado, nosotros tenemos mucho para aprender todavía. A lo largo del torneo creo que nos iremos emparejando". A su lado, Martínez cerró: “Ya es mi segunda Liga, arranqué más parejo que el año pasado respecto al resto, me siento bien y a nivel personal, creo que puedo hacer una buena liga. Más allá de las edades, cada uno se tiene que mentalizar en hacer lo que tiene que aportar para el equipo".