Gastón Fernández jugó en septiembre de 2016 la Copa Panamericana Sub 23, torneo en el que salió campeón y estuvo en el equipo ideal. Enseguida, volvió al país y empezó a entrenar con River, su nuevo equipo de Liga Argentina. Tuvo un gran inicio de temporada en lo individual y con el equipo, pero tiempo después recibió la noticia de la FIVB de un doping positivo por clembuterol en dicho torneo y es por eso que no pudo seguir jugando la Liga.  

En los últimos días, el “Pampa” recibió la notificación de la FIVB sobre el levantamiento de la suspensión provisoria y el central ya está en condiciones de volver a jugar. La Federación Internacional analizó el descargo y las pruebas presentadas por él, entendió su caso y resolvió levantarle la sanción que le aplicó a fin de año y por la cual Fernández no pudo participar con River de la Liga desde el 12 de enero, cuando se reanudó la competencia tras el receso por las fiestas.

Hoy, después de tres meses difíciles para él, Gastón Fernández decidió contar todo lo que pasó en una situación en la que su familia y River, a través del presidente de la subcomisión de vóley Horacio Galetar, fueron el sostén.

“Estuve envuelto en una situación injusta después de jugar un torneo con la Selección por haber comido carne contaminada. Nunca tomé ningún tipo de sustancia no permitida para hacer deporte de alto rendimiento”, afirmó Fernández y agregó: “Con todo esto que pasó no sólo fui afectado en lo deportivo, ya que en lo que va del 2017 no pude jugar, sino también en lo anímico”.

El clembuterol es un broncodilatador que se usa como fármaco para casos como el asma y también se utiliza para acelerar el desarrollo del ganado vacuno, actuando de manera similar a un anabólico en el organismo humano. En 2016, una jugadora de la Selección peruana de vóley, Mirtha Uribe, dio doping positivo tras un paso por México en el que se comprobó que había sido por la ingesta de carne contaminada. La FIVB, en ese caso, le redujo a la sanción a un año por comprobar su inocencia.

En estos meses, Fernández prefirió el silencio, pero la noticia se supo desde los primeros días del año. “Además de toda esta situación, me sentí dolido porque en todo este tiempo se dijeron cosas sobre mí que no eran ciertas y hablaron sin conocer realmente cómo era el tema. Pero todo eso también hizo que me fortaleciera para llevar adelante todo esto tan feo que me tocó vivir. Estoy muy contento de poder volver a jugar”, afirmó.

Y continúa el relato: “Desde que me llegó la noticia, cumplí con todo lo pedido por la FIVB en tiempo y forma y conté con un importante apoyo de Brian Eddi, mi tío, que siguió el caso de cerca y fue el nexo con los abogados de River, quienes conjuntamente hicieron el descargo que presenté ante la FIVB a principios de enero. Es por eso que estoy muy agradecido con ellos y con el club, que además me siguió bancando en todo sentido. Además, colaboraron mucho en lo anímico. También la ACLAV, desde el primer momento, manejó con mucha seriedad y tacto una situación que nunca había pasado durante una Liga”.

“Espero que esto que me pasó a mí no le pase a nadie y que todos los que pasan por la Selección o cualquier competencia deportiva sepan que tienen que tener información de a dónde van, qué comen y qué toman, para que no sufran una situación así. Por suerte, todo esto ya pasó y ahora sólo pienso en volver a jugar”, finalizó Fernández.