A pesar de tener sólo 20 años, el líbero Ignacio Fernández se puede considerar un histórico de Ciudad. Sus padres lo hicieron socio del club a los dos días de haber nacido y es el único equipo en el que jugó al vóley. “Si fuera por mí, jugaría siempre en Muni”, asegura.

Ciudad debutará este sábado en la Liga Argentina 2014/15 nada menos que contra Bolívar -flamante campeón de la Copa ACLAV- en el estadio República de Venezuela. “Es un rival muy duro, que trajo refuerzos importantes. Pero confiamos mucho en nosotros”, expresa “Nacho” Fernández, que disputará su segunda Liga A1 y que este año integró el seleccionado juvenil.

Para la Liga, el líbero es optimista: “Son todos muy buenos equipos, va a ser una liga más competitiva que la anterior. Sin embargo, creo que estamos para pelear entre los de arriba”.

Ciudad, el equipo dirigido por Hernán Ferraro, incorporó algunos refuerzos de experiencia para esta temporada como Leonardo Patti, Gabriel Arroyo y Mariano Giustiniano, a diferencia de la primera Liga A1, en la que tenía el plantel más joven del certamen.

“Influye mucho que hayan venido jugadores experimentados, a la hora de entrenar, en los momentos previos al partido… Es una garantía estar al lado de ellos”, manifiesta Fernández.

Hincha de Independiente (“soy infaltable en la cancha siempre que el vóley me lo permita”), el líbero cree que tiene más para aportarle a Ciudad este año, habiendo sumado también la experiencia de la Selección Sub 22, con la que consiguió en Saquarema, Brasil, el subcampeonato y la plaza para el Mundial Sub 23 de 2015.

“Vestir la camiseta argentina es un sentimiento que no se puede explicar. Me sirvió mucho para sumar experiencia. Específicamente creo que mejoré en la recepción, aunque todavía me queda mucho más por mejorar. Y también es muy importante la enseñanza y la confianza que Hernán (Ferraro) deposita en mí”, sostiene el número 18 de Ciudad.

Ferraro también fue su entrenador en el seleccionado Sub 22, en el que compartió plantel con Gastón Fernández, Brian Melgarejo y Pablo Kukartsev, todos de Ciudad. Otra persona que está siempre cerca de Nacho Fernández es su mamá, María Martha, ex jugadora de Muni y que lleva la planilla en los partidos de todas las categorías.

“Es de fierro, me banca siempre y está en cada partido que juego”, cuenta Nacho, que también tiene una hermana mayor voleibolista (Romina Flores, ex Ciudad, River y Ferro, que hace tres años está en Italia) y estudiará periodismo deportivo en la Casa de la Militancia, en el Espacio Memoria y Derechos Humanos (Ex Esma).

“Empecé el profesorado de Educación Física, pero no me convenció. Veremos como me va con el periodismo”, dice Fernández.