Luego del éxito rotundo que significó la primera edición de la Copa Libertadores de Voleibol, este domingo el Presidente ACLAV Eduardo Demaestri se reunió en Río de Janeiro con representantes de los equipos fundadores del torneo para proyectar la continuidad del mismo, rumbo a la próxima temporada.

El objetivo principal de la reunión fue empezar a trabajar en un nuevo formato de competencia que permita abrir las puertas del certamen a todos los países de Sudamérica. Según el bosquejo inicial, tres equipos de Argentina y tres de Brasil clasificarían directamente a la segunda edición de la Copa de acuerdo a los desempeños en sus ligas locales, mientras que las dos plazas restantes surgirían de dos torneos previos a la Copa, en los que los demás países del continente podrán iniciar su camino. 

De la misma forma en que la primera edición de la Copa pasó del papel a la realidad, el fruto del trabajo en conjunto entre los países será luego elevado a la Confederación Sudamericana, que como ente regulador del voleibol en el continente debe dar el visto bueno para su materialización.

Junto a Demaestri trabajaron representantes de las potencias de Brasil como Sada Cruzeiro, reciente campeón del Sudamericano de Clubes, Sesi-SP o Sesc-RJ, este último el subcampeón de la primera versión histórica de la Copa. Asimismo, el campeón también dijo presente a través de Javier  Weber, entrenador de Bolívar, y otro de los enviados de Argentina en suelo brasileño fue Omar Rei, quién participó en representación de TyC Sports.