El plantel transita las primeras semanas de pretemporada de cara a su segundo año en la Liga Argentina de Voleibol. El equipo mantuvo la base del año pasado y se reforzó convenientemente. “Queremos entrar en los play offs y después ver qué pasa”, coincidieron Arroyo y Bonini.

Con la mente fija en lo que va a ser su segundo año entre los mejores del país, el plantel de Pilar Voley está cerrando su tercera semana de exigente pretemporada en el gimnasio de la Cooperativa de Tortuguitas, donde seguirá haciendo de local.

La escuadra ideada por la Subsecretaría de Deportes de la Municipalidad de Pilar comenzó con sus labores a mitad de agosto a las órdenes del entrenador Fernando Borrero y, fundamentalmente en esta etapa, el preparador físico Pablo Añón.

En estos primeros días las tareas se centraron en el aspecto físico, pero con el correr de los días se irán sumando ejercicios técnicos y tácticos para que Borrero vaya incorporando conceptos de juego entre sus dirigidos. También a partir de las semanas venideras comenzarán a disputarse partidos amistosos. En ese sentido, Pilar Vóley ya tiene agendada su participación en algunos cuadrangulares (incluso alguno con equipos del exterior) y hasta en alguna gira por el interior provincial.

“Estamos contentos y conformes porque tenemos un equipos competitivo, el técnico nos dice que le gusta el equipo, que es equilibrado. Este año será un torneo difícil, todos los equipos se están reforzando y esperemos tener suerte y andar bien”, apuntó Juan Carlos Arroyo, titular de la dependencia deportiva pilarense.

El plantel tricolor está integrado por Francisco Russo, Nicolás Tibaldo, Enrique Laneri, Juan Ignacio De Céspedes, Alejandro Araya, Manuel Terán Ulloa, Gabriel Arroyo, Diego Bonini, Santiago Danani, Adalberto Liand, Nicolás Grané y los brasileños André Eloi y Alan Verissimo.

Caras nuevas

Dos de las caras nuevas que tiene Pilar son las de Gabriel Arroyo y Diego Bonini, los exseleccionados que además se han convertido en dos de los imanes más relevantes para el público. Por historia y presente, ellos seguramente serán de los referentes del elenco.

“¿Qué encontré en Pilar? Un grupo importante de jugadores, muy competitivo y un buen grupo humano, que es lo fundamental. Estoy contento por estar acá, con un buen cuerpo técnico y estamos trabajando fuerte”, contó Gabriel Arroyo. En el mismo sentido, Diego Bonini dijo estar “a gusto y contento” y subrayó que para el se trata de “un nuevo desafío” porque se trata de “un equipo con muchas cosas por ganar, mucho por hacer”. “Hay un mundo por delante”, graficó.

Arroyo, que se desempeña como central, indicó que habló varias veces con Jorge Bellendier, director deportivo de Pilar Voley, y por suerte se dio el pase. “Es un buen proyecto y hay que disfrutarlo porque podemos dar pelea”, aseguró.

Bonini, que será el opuesto titular de la formación, elogió el trabajo físico que se está llevando a cabo porque “es duro pero es la base de todo el año”. “Nos quejamos un poco pero sabemos que eso sirve después”, agregó. A su turno, Arroyo destacó que la cuestión física “será fundamental para enfrentar a equipos que están arriba nuestro”.

Con respecto a los objetivos deportivos, Arroyo afirmó que “la idea es entrar a los play off, es el primer objetivo y luego ir paso a paso pensando en llegar a semis. Obvio que tenemos posibilidades pero siempre con la cabeza fría”, en tanto que para Bonini “el objetivo es ponernos bien y que después las cosas se vayan dando. Queremos entrar a los play offs y yo quiero un poco más, meternos en semifinales y ver qué pasa. Ahora nos estamos concentrando en trabajar, hay que ensamblar el equipo y después veremos para qué estamos”.

Finalmente, el opuesto de 2,03 metros aseveró que Pilar Vóley será “un equipo aguerrido, lindo de ver. Seguramente contagiará al público, a los chicos y será un equipo divertido de ver, independientemente de los resultados”.