Una nueva señal positiva para la evolución de Lomas Vóley como proyecto integral en el voleibol nacional. Con la disputa del reciente Campeonato Sudamericano Mayor en Brasil, se reafirmó la creciente interacción entre Lomas y la Selección Argentina, que en esta ocasión contó con cuatro jugadores del equipo dentro del plantel que terminó subcampeón.

Juan Martín Riganti, Maximiliano Scarpin, Lisandro Zanotti y Facundo Imhoff fueron los convocados por el cuerpo técnico albiceleste para formar parte del torneo en Maceió, en el que la Selección nacional confirmó que ocupa, junto al multicampeón Brasil (ganó todos los Sudamericanos de la historia, menos uno), los dos lugares más altos de la escena continental. Zanotti e Imhoff, además, están entre los catorce que disputarán el Preolímpico continental en Venezuela, este fin de semana.

Este cuarteto es solamente la prueba más fresca de un vínculo que existe desde el mismo nacimiento de Lomas Vóley, hace un par de temporadas. El líbero Franco Massimino, uno de los que permanece en el plantel desde esos inicios, también fue parte de los procesos de Selección nacional a partir de su buen rendimiento en Lomas. También lo hizo Ramiro Núñez, integrando varias selecciones juveniles hasta lograr la clasificación al Mundial Sub 23.

Lomas Vóley además contó con representación en el pasado Mundial de Polonia 2014, en el que Argentina logró un positivo undécimo puesto. Allí, Alejandro Toro formó parte de los 14 jugadores que disputaron la gran cita. Y Lucas Ocampo, un crédito lomense que dio el salto hacia el voleibol de Brasil, no sólo integró varias veces la Selección Mayor sino que hasta tuvo el gusto de vestir la camiseta celeste y blanca en el propio Microestadio del Parque Eva Perón, en el marco de la Liga Mundial 2014 que Argentina disputó en Lomas de Zamora. Esos mismos duelos ante Japón los jugó Agustín Ramonda, flamante refuerzo para esta temporada.

Cada vez más veces los ojos de la elite argentina se posan sobre Lomas de Zamora. Y eso no es casualidad. El buen trabajo diario de un cuerpo técnico que está en todos los detalles, una dirigencia comprometida y el profesionalismo de cada uno de los jugadores en los entrenamientos arman la fórmula perfecta para un presente celeste y blanco que no tiene techo.